Sergio Garrote se sobrepone a la lluvia para colgarse la plata en ruta

Clichy-sous-Bois, 5 sep (EFE).- Un día después de ganar el oro en la contrarreloj, el barcelonés Sergio Garrote se colgó la plata en la carrera de ruta, clase H2 de bicicletas de mano, al quedar segundo por detrás del francés Florian Jouanny, en una prueba marcada por la lluvia, que obligó a retrasar el inicio una hora.

El deportista español Sergio Garrote celebra la medalla de plata en la carrera de ciclismo en ruta H2 Clichy-Sous-Bois de los Juegos Paralímpicos de París este jueves. EFE/ David Ramirez/CPE /
El deportista español Sergio Garrote celebra la medalla de plata en la carrera de ciclismo en ruta H2 Clichy-Sous-Bois de los Juegos Paralímpicos de París este jueves. EFE/ David Ramirez/CPE /

Clichy-sous-Bois, 5 sep (EFE).- Un día después de ganar el oro en la contrarreloj, el barcelonés Sergio Garrote se colgó la plata en la carrera de ruta, clase H2 de bicicletas de mano, al quedar segundo por detrás del francés Florian Jouanny, en una prueba marcada por la lluvia, que obligó a retrasar el inicio una hora.

La carrera se desarrolló sobre un recorrido urbano de 14,1 kilómetros y dos rampas de 4.5 y 4.7%, al que se dio tres vueltas hasta completar 42,6, con salida y llegada en Clichy-sous-Bois, municipio a quince kilómetros al este de París, con 30.000 habitantes.

La apuesta personal que hizo Garrote junto a su familia para entrenar en altura le ha venido bien y sus resultados los demuestran. Durante cinco meses, desde abril hasta casi el inicio de los Juegos, el ciclista español alquiló un apartamento en La Molina, en el Pirineo catalán, para adaptarse a la exigencia de unos nuevos Juegos.

Garrote, que concluyó la primera vuelta en primera posición, se vio superado al principio de la segunda por el francés, que impuso un ritmo muy alto y fue el que mejor se adaptó a la intensa lluvia que cayó y que provocó un retraso en el inicio de la competición.

El español llegó a meta con un tiempo de 1:20.40, a veintidós segundos de Jouanny. Junto a ellos, en el tercer escalón del podio, el italiano Luca Mazzone se llevó el bronce.

El ciclismo, fuente de alegrías

Sergio Garrote, que perdió la movilidad en la piernas a raíz de un accidente laboral en 2001, participó por primera vez en unos Juegos Paralímpicos en Tokio 2020, donde se hizo con un oro en la contrarreloj y con un bronce en la prueba de ruta en la categoría H2 para handbikes.

Desde entonces, ha cosechado numerosos éxitos a nivel internacional, como las dos medallas de plata que se colgó en el Mundial de Cascais (Portugal) en 2021, una en la prueba de relevos y otra en la contrarreloj; o los dos oros en la Copa del Mundo en Ostende (Bélgica) en las pruebas de fondo y en contrarreloj.

En 2022 regresó del Mundial de ciclismo de Baie-Comeau (Canadá) con tres preseas (oro en la contrarreloj y bronce en carrera de ruta y relevos) y comenzó 2023 colgándose la plata en la Copa del Mundo de Maniago (Italia) y un oro en la de Huntsville (Estados Unidos), para después ampliar su palmarés con el primer puesto en la contrarreloj en el Mundial de Glasgow (Escocia), entre otros títulos.

Aún así, su estela de éxitos se remonta a años atrás, ya que desde que descubrió las bicis de mano –handbikes–, Sergio Garrote ha conseguido grandes resultados.

A los seis meses de debutar ya ganó una Copa de España y una semana después fue campeón de Europa. En 2016 fue campeón de España en contrarreloj, ruta y relevos por equipos. En 2018 ganó la medalla de oro en el Mundial de ruta en carretera de Canadá, en 2019 se convirtió en el número uno de la clasificación mundial de su clase y en 2020 consiguió quince oros entre campeonatos mundiales, europeos y nacionales.

El deportista catalán, que tiene estudios de Medicina y Criminología, sufrió un accidente laboral mientras trabajaba en una obra que le causó una lesión medular.