Día 11. Fermín y Juanlu, a por el oro en fútbol, el baloncesto 3x3 se lleva la plata

París, 5 ago (EFE).- Fermín, nueva ola del FC Barcelona, y Juanlu, emergente también del Sevilla FC, firmaron la remontada de la selección española en el fútbol tras vencer a Marruecos (2-1), se clasificaron para la final y sueñan ya con repetir un oro olímpico, que no consigue España desde Barcelona '92, con el histórico gol de Kiko a Polonia en el Camp Nou.

El defensa español Juanlu lanza a portería para anotar el 1-2 ante Marruecos durante el partido de semifinal de Fútbol, entre España y Marruecos, en el marco de los Juegos Olímpicos París 2024, este lunes, en Marsella, Francia. EFE/Kiko Huesca
El defensa español Juanlu lanza a portería para anotar el 1-2 ante Marruecos durante el partido de semifinal de Fútbol, entre España y Marruecos, en el marco de los Juegos Olímpicos París 2024, este lunes, en Marsella, Francia. EFE/Kiko Huesca

París, 5 ago (EFE).- Fermín, nueva ola del FC Barcelona, y Juanlu, emergente también del Sevilla FC, firmaron la remontada de la selección española en el fútbol tras vencer a Marruecos (2-1), se clasificaron para la final y sueñan ya con repetir un oro olímpico, que no consigue España desde Barcelona '92, con el histórico gol de Kiko a Polonia en el Camp Nou.

El triunfo de España encabeza la lista de las cinco noticias de la jornada en París 2024:

1-2. Remontada y a por el oro

España sufrió, pero remontó ante Marruecos (1-2) gracias a los goles de Fermín López y del revulsivo Juanlu Sánchez en la segunda parte para volver a disputar una final olímpica. La segunda consecutiva tras la de Tokio 2020 en la que se fue con una plata que intentará convertir en oro el próximo día 9 de agosto en París.

El partido lo empezó ganando Marruecos en las gradas. En la reunión prepartido del domingo se comunicó que el público iba a estar dividido en un 70% para Marruecos y un 30% para España. Fue un porcentaje muy optimista de para los españoles. El rojo y el verde fueron amplia mayoría con alguna bandera de España esporádica en un Vélodrome que no se llenó. Unos 60.000 espectadores de los 67.000 de capacidad máxima.

Adrián Bernabé fue el que, con su energía, generó el empate de España. Se internó en el área, se buscó la vida ante la presión de tres jugadores de Marruecos y consiguió rascar un balón suelto que cogió Fermín y, con la zurda, igualó el marcador en el minuto 66, anotando su cuarto gol del torneo.

Y Juanlu Sánchez, novedad en la convocatoria en lugar de un Diego López que no se encontraba al 100%, culminó la remontada. Activo pidiendo el balón por dentro y por fuera y mostrándose en ataque, acabó llegándole su premio.

Las españolas, plata del baloncesto 3x3 al caer ante Alemania (16-17) 


La selección femenina española de baloncesto 3x3 perdió este lunes la final olímpica en París ante Alemania (16-17), pero dio a España su novena medalla en estos Juegos, la tercera de plata hasta el momento.


A pesar de la derrota de esta noche, Vega Gimeno, Sandra Ygueravide, Gracia Alonso de Armiño y Juana Camilión -nombres desconocidos para el gran público hasta hace unas semanas- se han ganado a pulso convertirse en cuatro de los rostros españoles de estos Juegos.


Han dado a su país la plata ante la presencia del rey Felipe VI y de Pau Gasol, cuando casi nadie lo esperaba al inicio del torneo, y han divulgado la modalidad del 3x3, que cumple sus segundos Juegos tras los de Tokio, en los que España no estuvo.

Carolina Marín, rotura ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha y los dos meniscos

Carolina Marín, lesionada ayer domingo en las semifinales de badminton de los JJOO en París, sufre una rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha, de la que fue operada a comienzos de 2019, y padece además una rotura del menisco interno y externo, según el parte médico hecho público esta tarde por sus representantes.

"Próximamente se hará una valoración para determinar el tratamiento y concretar la fecha de la operación", explicó la nota informativa.

Noah Lyles, el "elegido" para intentar suceder a Usain Bolt

Cinco milésimas. Esa ínfima fracción de tiempo es la que permitió a Noah Lyles salir por la puerta grande del Estadio de Francia y entrar en el libro de historia de los campeones olímpicos de los 100 metros, una distancia que, cada cuatro años, define al rey de la velocidad, un trono que ahora ocupa el estadounidense, el 'elegido' para muchos.

Durante muchos años, de 2008 a 2016, el jamaicano Usain Bolt fue el hombre más rápido del mundo y, de hecho, las dos plusmarcas mundiales de los 100 y 200 metros aún las conserva él con 9,58 y 19,19, respectivamente.

Con esos dos tiempos vive obsesionado desde hace mucho Noah Lyles, que en varias ocasiones ha declarado públicamente su intención de rebasar esas marcas y así emular a Usain Bolt. Se ve capaz pero la superioridad con la que ganaba el jamaicano no es la misma. En París, en un estadio abarrotado con cerca de 80.000 espectadores, tuvo que esperar a la resolución de la foto 'finish' para conocer su victoria. El triunfo fue por solo cinco milésimas ya que el tiempo (9.79) fue el mismo que registró el jamaicano Kishane Thompson.

El estadounidense, que esta temporada ha firmado un millonario contrato con Adidas, traspasa las fronteras más allá de la pista de atletismo. Tiene su propio canal de contenidos en YouTube, trabaja con una agencia creativa que le ayuda y asesora con los contenidos y su imagen está asociada a multitud de marcas como Omega o Visa, además de ser protagonista de un documental de Netflix.

Duplantis, sin límites


París. En el Estadio de Francia, abarrotado de público en sus gradas, con casi 80.000 espectadores, el sueco Armand Duplantis siguió agrandando su leyenda con otro nuevo triunfo en el salto con pértiga, el segundo olímpico, además con récord del mundo (6,25 metros), tras un concurso en el que no tuvo rival.


Duplantis hace mucho tiempo que compite contra sí mismo. Competición a la que va, competición que gana. Es el mejor saltador con pértiga de la historia y, aparte de sus medallas, sus marcas lo acreditan. Llegó a París como plusmarquista mundial con 6,24 metros, un registro que hace años parecía impensable para cualquiera y que, a día de hoy, se ve impensable para sus rivales. La prueba es que de los treinta restantes competidores en París solo cinco llegaron a los Juegos habiendo los seis metros.
Tras el trámite de la clasificación, la final fue como un entrenamiento para el sueco, al que en ocasiones se le vio distendido, sin nervios, hablando con los rivales e incluso sentado en el banco con la mirada pérdida, reflejo de la relajación.


La victoria se la llevó con un salto de 6,25 metros, en su tercer intento, batiendo su propio récord mundial y arrebatando también el récord olímpico al brasileño Thiago Braz, que el 15 de agosto de 2016 lo estableció en 6,03 metros.
 

Andrade, las italianas y el colombiano Barajas roban el protagonismo a Biles en la jornada final

La brasileña Rebeca Andrade, oro en suelo, las italianas Alice D'Amato y Manila Esposito, oro y bronce en barra, y el colombiano Ángel Barajas, plata en barra, fueron las protagonistas de la jornada final de la gimnasia artística en París, en la que Simone Biles no pudo ampliar su cuenta de tres oros pero sumó una plata sobre el tapiz de Bercy.

La estadounidense, invencible en las jornada precedentes, se cayó de la barra y se salió dos veces del cuadrilátero en su rutina de suelo, unos errores que hasta ahora no había cometido en sus exhibiciones gimnásticas en París.

Andrade logró su cuarta medalla de estos Juegos, primera de oro, con 14,166 puntos a cambio de un ejercicio brillante, defendido con seguridad en cada una de sus dificultades.

La alta exigencia del ejercicio de Biles, 6,900 frente a los 5,900 de Andrade, le permitió alcanzar la plata pese a sus dos salidas, con un total de 14,133. Y por detrás de ella quedó su compañera Jordan Chiles con 13,766, tras reclamar con éxito una subida de su nota.